El laboratorio Sinergium, es el principal fabricante de vacunas en América Latina, negocia con Sinopharm la posibilidad de importar el antígeno desde China y terminar la producción en Argentina. Todo depende del visto bueno del gobierno chino.
“La negociación está bien encaminada. Sinergium Biotech tiene una larga relación con el gigante chino, Sinopharm, y está en condiciones de terminar 20 millones de dosis en forma bastante rápida”. Con esa frase se abre la puerta para que Argentina reciba el antígeno, el elemento activo, de la vacuna china y se den los pasos finales de su producción en la planta que Sinergium (de las familias Bagó, Sielecki, Gold y Sigman) tiene en la Provincia de Buenos Aires.
Sinergium es el mayor productor de vacunas del país. Fabrica la vacuna contra la gripe que actualmente compra la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para distribuir en distintos países de la región. Es la primera vez que la OPS compra a un proveedor latinoamericano. También produce para Pfizer la vacuna contra la neumonía y para Merck la vacuna contra el cáncer de cuello de útero.
La planta de Garín está en condiciones de hacer lo que llaman fill-finish, es decir las tareas finales: descongelar, filtrar, formular, envasar, hacer los controles de calidad y distribuir.
Los antecedentes.
El antecedente más importante de la nueva negociación es que Sinopharm realizó parte de la fase III de su vacuna en la Argentina, concretamente en la Fundación Huésped, que lidera el doctor Pedro Cahn. Participaron en el proceso 4.000 voluntarios; a 2.000 se les aplicó la vacuna y a 2.000 el placebo. En ese trabajo también se sumó Sinergium, que presentó todas las conclusiones en la ANMAT, gestionando, no una autorización de emergencia, sino la autorización definitiva de la vacuna en la Argentina.
Hace siete años, Sinergium Biotech le transfirió a Sinopharm la tecnología para fabricar un producto contra determinados tipos de linfomas. El proceso fue exitoso, de manera que la propuesta vino ahora como resultado de una relación que ambas partes mantienen desde entonces y que tuvo otro punto de encuentro en la fase III de la vacuna. Sinopharm, además, tiene en cuenta que la planta de Garín está aprobada por la FDA norteamericana y la EMA europea, es decir que ya tiene un respaldo para exportar a otros países.
El estado de la negociación.
El próximo paso lo tiene que dar Sinopharm, la mayor empresa farmacéutica de China. Es un gigante estatal con 128.000 empleados, que tiene hospitales, farmacias y produce una enorme cantidad de medicamentos. Cotiza en bolsa y se dice que su valor es de 20.000 millones de dólares.
El pequeño detalle es que el gobierno chino está prohibiendo la exportación de vacunas para privilegiar la aplicación a los ciudadanos de ese país: el Partido Comunista Chino celebra sus 100 años el 1 de julio y pretende tener inmunizados para esa fecha a 520 millones de chinos. Sin embargo, podría haber una ventana en la exportación sólo del elemento activo, ya que no requiere de un insumo escaso que es el vidrio y el embotellado.
Del lado de Sinergium, cuyos accionistas son Sebastián y Juan Carlos Bagó; Daniel y Carlos Sielecki, Luis Alberto Gold y Hugo Sigman, están listos para el acuerdo y dicen que están en condiciones de procesar el elemento activo congelado ni bien llegue. En pocos meses podría terminar unos 20 millones de vacunas, pero para eso se requiere el visto bueno de la parte china.