El radicalismo se apresta a elegir entre fines de abril y principios de mayo a las nuevas autoridades de su Convención Nacional, uno de los órganos de conducción partidaria junto con el Comité Nacional y que tiene el rol estratégico de establecer las alianzas electorales para los comicios presidenciales de 2023.
Las elecciones de este año de la convención, a priori, repetirán la disputa de poder que se dio durante la elección de autoridades del Comité Nacional, cuya conducción ejerce desde diciembre el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, tras lograr que una gran mayoría de representantes de todo el país respaldaran su candidatura frente a la intención de alzarse con ese puesto del senador Martín Lousteau y su línea interna, Evolución.
La convención es uno de los órganos más antiguos del radicalismo y está integrada por más de 300 convencionales de todo el país. Cada provincia está representada por un número equivalente a la cantidad de diputados y senadores nacionales que tiene cada distrito.
Así, por ejemplo, la ciudad de Buenos Aires tiene 28 convencionales: el equivalente a la representación de sus 25 diputados nacionales y tres senadores nacionales.
El sector mayoritario del partido, referenciado en los potenciales candidatos presidenciales Gerardo Morales y Facundo Manes, estaría de acuerdo en impulsar para el rol de titular de la convención a Gastón Manes, hermano del diputado nacional.
Mientras que el sector de Lousteau, Evolución, se inclinaría por Hernán Rossi, actual funcionario del Ministerio de Desarrollo Económico de la Ciudad.