La variante Delta de coronavirus es la que hoy tiene preocupado al mundo. Su rápida expansión ha provocado angustia en lugares donde pensaban que ya tenían la pandemia controlada. En Reino Unido, los índices de contagios en febrero parecían estar controlados hasta la llegada de Delta.
En ese marco, un relevamiento de la Agencia de Salud Pública de Reino Unido develó que los adultos jóvenes que aún no se vacunaron constituyen el principal grupo afectado por la cepa. Un dato que evidencia la importancia de acceder a la vacunación con dos dosis.
El 84,6% de la población adulta en el Reino Unido ya recibió al menos una dosis de la vacuna y el 62,1% está totalmente vacunado. El Gobierno decidió a fines del año pasado diferir la segunda dosis para alcanzar a más personas con la primera dosis.
Nadhim Zahawi, el ministro encargado de la vacunación, señaló que si bien los casos aumentan, no crecieron las internaciones por casos graves en los hospitales. Entre las personas que habían recibido dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 y se infectaron con la variante Delta, menos de una de cada 10 personas fue hospitalizada.
“La mayoría de los adultos jóvenes tienen una sola dosis de vacuna, o ninguna. Esos son los que marcan el aumento de casos. Las buenas noticias: las internaciones no parecen subir demasiado por ahora”, comentó en Twitter el doctor Oscar Cingolani, profesor asociado de medicina en la Universidad Johns Hopkins de los Estados Unidos.
En ese sentido, precisó que “al haber vacunado de manera completa al personal de riesgo y adultos mayores predominantemente, se observa que los casos afectan a la población más joven, con una variante más transmisible”.
Los datos difundidos por la Agencia de Salud de Inglaterra forman parte de un relevamiento realizado entre el 1 de febrero y el 21 de junio. Se registraron aproximadamente 92.000 infecciones con esta variante (incluidas casi 80.000 en los últimos 28 días), según el último boletín publicado el viernes.