Un equipo de investigadores del centro de innovaciones ruso Skólkovo ha presentado al público un dispositivo que podría cambiar para siempre las vidas de las personas invidentes.
El aparato, bautizado como Elvis —una abreviación de Electronic Vision (visión electrónica, en español)— está integrado por un implante neural, una diadema equipada con dos cámaras y un pequeño ordenador.
El microchip, implantado en el cerebro, estimula la corteza visual, algo que le da a una persona ciega la impresión de poder ver. Luego, el microordenador analiza en tiempo real las imágenes captadas por las cámaras instaladas en la diadema y define sus contornos con la ayuda de la inteligencia artificial. Finalmente, vuelve a enviar los datos al implante.

«Si bien esto todavía no se puede calificar de un sustituto de la vista, es algo que definitivamente mejorará la calidad de vida de los invidentes», declaró el vicepresidente de Skólkovo, Kiril Kayom, quien compara el invento con los implantes cocleares que devuelven el oído a las personas con dificultades auditivas.
/Sputniknews