Las redes sociales, cualquiera sea la elegida, se transforma en casi una vida paralela con la del usuario. La necesidad impulsiva de ser parte e imitar los consejos «en primera persona» de ídolos/as convertidos en influencers puede ser dañino si no se realiza el quiebre entre la realidad y la virtualidad.
No se debe caer en el «endemonizar» el uso de redes sociales y los llamados influencers, o figuras públicas de estos sitios. Sino, propiciar el uso conciente de las mismas como una herramienta que permite tener acceso a cierta información, ya sea formal, informal o por mero entretenimieto.
Al ver personas reales en los posteos de en redes algunas personas pueden darle más valor a sus dichos, no aparecen como personas muy alejadas de la realidad de cada uno. El boom de las redes sociales, entre otros, se debe a que muestra la «cotidianidad», ya no está el ídolo en una pantalla de tv, revistas, interpretando un personaje, sino que está «fulanito/a», en su hogar, en sus vacaciones, con sus amigos/as, familia. Muestra qué come, qué rutina de ejercicios hace, cómo elige su ropa, cómo a veces está triste, feliz, enojado/a. En fin, se puede decir que las redes sociales han humanizado a figuras como modelos de pasarela.
La cuenta de Instagram de LATFEM, en el día de ayer realizó un interesante posteo sobre cómo las imágenes de publicadas en esta misma red social dedicada a la imagen, casi en un 100%, daña el autestima de los/as jóvenes, pero sobre todo de las muchachas. Lo llamativo del posteo es que revela algo que ha sido callado a voces: «Lo más grave de esta novedad es que Instagram está al tanto del impacto que causa. Sabe cómo se manipula nuestra autopercepción, cómo empeora nuestra autoestima y cómo profundiza las desigualdades mientras reproducee los estereotipos de género, pero (para sorpresa de nadie) no hace nada al respecto Al mismo tiempo… es a través de esta plataforma que podemos comunicarnos con ustedes, debatir estos temas y señalarlos», cita la publicación.
LATFEM replica un informe realizado por el diario de EE.UU The Wall Street Jounal. El mismo revela un informe interno de Facebook donde aseguro que que los/as responsables de Instagram son concientes que la plataforma tiene contenido que daña la autopercpción de 1 de cada 3 adolescenten en modo negativo.
Visita el posteo de LATFEM ingresando aquí.
Algunos consejos para revertir estos síntomas en adolescentes:
- Dejar de seguir a las cuentas que les hacen sentir mal con su propio cuerpo.
- Customizar el feed para seguir cuentas de personas con pluralidad de cuerpos.
- Evaluar los mensajes de les influencers que seguimos: ¿son críticos, positivos o haters? A veces bancamos los tres, pero es importante saber qué nos generan.