Científicos del Instituto Español de Oceanogragía (IEO) y el CEDRE francés publicaron su trabajo en la revista científica Journal Materials. El estudio cuantifica la transferencia de metales pesados desde los filtros de cigarrillos al mar, afectando al ecosistema en su conjunto.
“El primer resultado destacable fue que los filtros fumados, respecto a los vírgenes, muestran niveles de metales hasta 90 veces superior” explica la publicación.
Según los datos publicados, el cobre fue el elemento con mayor porcentaje de transferencia al mar, con más del 90%. El estroncio marcó un porcentaje del 40%.
Los científicos responsables de la investigación han propuesto que las tabacaleras paguen tarifas adicionales para apalear la contaminación que sus productos producen en todo el ecosistema del océano.